La barricada de Pablo Iglesias y Bergoglio

Imágenes: ‘Vanity Fair’ y forocatolico.wordpress.com

Pablo Iglesias, líder de Podemos, declara a la vana y vanidosa revista Vanity Fair: «No soy como Jesucristo, pero a mí la interpretación que hace Francisco del Evangelio me convence. Creo que ahora mismo Bergoglio y yo estamos en la misma barricada» (19.2.15).

En su día ya analizamos los patéticos aplausos de Iglesias al papa en el Parlamento Europeo. Siendo que Podemos es un partido que podría tocar poder, consideremos ahora la relación de Francisco con la política española: en estos dos años, ¿qué medidas ha tomado, o siquiera anunciado, el papa “revolucionario” con respecto a los privilegios de la Iglesia Católica Romana en España, empezando por los escandalosamente abusivos Acuerdos de 1979? ¿Considera Iglesias que Bergoglio podría llegar a llegar a promover, o consentir, una revisión del sistema de financiación de su iglesia aprobado por el pro católico Zapatero (sistema que además incumple esos acuerdos, para beneficio de la ICR), y del conjunto de medidas que permiten que miles de millones de euros públicos acaben cada año en manos de esta institución? ¿Pueden confiar los ciudadanos en que Podemos promoverá una separación real entre la ICR y el estado español?

En cuanto a las declaraciones del actual papa en materia de derechos humanos y sociales, ¿es consciente el líder de Podemos de que puede que no sean más que gestos y frases bonitas para atraer a más gente hacia la órbita vaticana? ¿No es llamativo que todos los grandes poderes políticos, económicos y mediáticos –valga la redundancia– siempre hablen bien de Francisco?

Creemos que las corrientes críticas deberían hacerse cuestionamientos como los precedentes. Esa es, además, la “barricada” en la que debería desarrollarse la política de un partido que respete la libertad religiosa y de conciencia y la igualdad entre todos los españoles, independientemente de sus creencias. LEx